Declaración del movimiento MeToo Universidad hacia el tratamiento informativo de las últimas semanas sobre el acoso sexual en la universidad

Declaramos que:

Hay periodistas que han hecho y hacen un trabajo muy profesional que ha ayudado mucho a superar la impunidad del acoso sexual en nuestras universidades y así ha sido destacado en las revistas de más impacto científico a nivel mundial como Feminist Media Studies. Hay otros periodistas que han buscado y buscan sensacionalismo, audiencia, a expensas de las víctimas y también su carencia de profesionalidad está analizada en las revistas científicas internacionales.

Clarificamos algunos de los criterios imprescindibles para que las noticias de los medios ayuden a romper el silencio necesario para la superación del acoso sexual y la violencia de género en las universidades:

  1. El acoso sexual en nuestras universidades no es una problemática aislado de una universidad en concreto. Se trata de un problema arraigado en nuestras universidades gracias al sistema de omertá que ha contribuido a perpetuar el silencio y la protección a los acosadores durante años. Desgraciadamente existen casos en todas las universidades, no trasladarlo informativamente así es perjudicar gravemente la superación de esta problemática.
  1. Los medios y periodistas que demuestran su profesionalidad siempre están a favor de las víctimas y supervivientes, en todos los casos; y si alguna vez lo hicieron diferente, rectifican públicamente lo que hicieron. Los que mienten para estar algunas veces a favor de los acosadores y otros en contra, no favorecen la superación del acoso, usan a las víctimas por sus objetivos concretos.
  1. Los medios y periodistas que demuestran su profesionalidad no invisibilizan a las víctimas, supervivientes ni a las científicas de más nivel internacional en este tema. Invisibilizar las voces de las mujeres científicas es una práctica machista que dificulta la superación del acoso.

Con estos tres puntos, reiteramos nuestro compromiso siempre junto a las víctimas, supervivientes y de la verdad para continuar rompiendo el silencio por unas universidades libres de violencia de género y violencia de género aisladora.

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